Un detergente elimina las manchas orgánicas y aceitosas de la ropa por medio de surfactantes, que son uno de los ingredientes principales del detergente. Los surfactantes interactúan con el agua y el aceite de manera diferente, eliminando las manchas de grasa de la ropa cuando entran en contacto con el agua en una lavadora.
La palabra "surfactante" significa agente tensioactivo, un nombre derivado de su estructura química. La cola de una molécula de surfactante es atraída por la suciedad y la grasa, mientras que la cabeza de la molécula es atraída hacia el agua. Una vez que una prenda de ropa entra en contacto con agua que contiene detergentes, un extremo de la molécula de surfactante se adhiere a la grasa, mientras que el otro se adhiere al agua. Cuando se aplica energía mecánica a una prenda de vestir, como cuando se gira en una lavadora, las moléculas asumen la forma de pequeñas esferas que contienen la grasa, y posteriormente se enjuagan cuando el agua se drena.
Además de los surfactantes, los detergentes modernos contienen enzimas, tintes azules y blanqueadores. Las enzimas degradan las manchas a base de proteínas, mientras que los blanqueadores aumentan el poder de los agentes de limpieza y eliminan el color de las manchas. Se agregan tintes azules a los detergentes para evitar que la ropa se vuelva amarilla. Los detergentes se hacen típicamente a partir de productos oleoquímicos, que se derivan de animales y plantas, y de productos petroquímicos. También contienen oxidantes y álcali.