Una prueba de funcionamiento en seco es un proceso en el que una computadora, un equipo eléctrico o una pieza de hardware se prueban para determinar su estabilidad y problemas de rendimiento antes de su lanzamiento. Una prueba de funcionamiento en seco se realiza en condiciones controladas para minimizar los efectos negativos de cualquier falla del producto.
Cuando se realiza una ejecución en seco con un programa de computadora, el programador prueba cada paso del programa a través del análisis del código fuente. El programador hace esto para observar lo que hace el programa cuando se ejecuta. Una ejecución en seco en la programación de computadoras suele ser asistida por una tabla para rastrear las variables del programa.