Un dispositivo literario utilizado en la novela "El señor de las moscas" es la alegoría. El autor, William Golding, utiliza los personajes y el entorno de la novela para representar el tema universal de El conflicto entre civilización y salvajismo.
El autor usa la difícil situación de los niños para examinar cómo las circunstancias influyen en el instinto humano y la capacidad del hombre para hacer el bien y el mal.
La isla en la que se encuentran los niños puede verse como un microcosmos del mundo en general, y las ideologías que adoptan para sobrevivir como representación de sistemas políticos o puntos de vista filosóficos y religiosos.
La alegoría termina con el rescate de los niños y el regreso a la civilización.