El río Amazonas suministra más agua dulce a los océanos del mundo que cualquier otro río. También tiene más afluentes que cualquier otro río y la cuenca más grande del mundo. Aunque un artículo de National Geographic publicado en 2007 ofrece algunas pruebas de que el Amazonas es el río más largo del mundo, la mayoría de los expertos aún lo ubican en el segundo lugar detrás del río Nilo.
La importancia del río Amazonas no se define únicamente por su tamaño. Es la sangre vital de una selva tropical increíblemente vasta y diversa. Esta selva tropical es la más grande del mundo. Se superpone a los límites de nueve países y la vida silvestre es tan abundante que se puede encontrar un tercio de las especies animales del mundo. Algunos de los animales más conocidos de la región son el jaguar, el ocelote y el perezoso de tres dedos. Las aguas de la Amazonía también se unen a la vida, y algunas estimaciones sitúan la cantidad de especies de peces en 5,000.
El interior de la cuenca del Amazonas experimentó poco desarrollo hasta el siglo XX, y el área permaneció en gran parte inaccesible e inculta. Desde entonces, se ha construido una red de autopistas que une las principales ciudades y permite un mayor acceso a los recursos disponibles. Aún así, a partir de 2014, la región contiene enormes áreas de bosques tropicales, pastizales y sabanas que permanecen sin desarrollar.