La mayoría de los críticos estarán de acuerdo en que comprar un televisor usado tiene sus riesgos, pero si es barato y parece que vale la pena, entonces debería comprarlo, según CNET.com. Los riesgos de comprar un televisor usado incluyen no saber la historia de cómo se manejó en el pasado o si funciona. Sin embargo, los precios a menudo pueden ser menos costosos que los de un modelo más nuevo.
El mejor curso de acción al acercarse a un televisor usado es ver la unidad en persona. Compruebe si hay signos de desgaste y asegúrese de que la calidad de imagen de la pantalla no haya sufrido. Si todas las ferias salen bien y el precio vale la pena, realice la compra, afirma CNET.com.