La biotecnología se puede utilizar para aumentar la disponibilidad de ciertas plantas y animales. También se puede utilizar para fabricar nuevas vacunas y para la creación de tratamientos avanzados. Por otro lado, la biotecnología puede llevar a la introducción de una nueva variedad de patógenos.
La biotecnología implica la manipulación deliberada de sistemas biológicos, organismos o procesos para fabricar productos diseñados para beneficiar la vida humana. Los científicos pueden cultivar plantas que contengan un nivel más alto de un nutriente particular para tratar las deficiencias de la dieta o diseñarlas para que tengan mejor sabor. Otro beneficio de la biotecnología es su aplicación en el control de plagas y enfermedades. Los biólogos pueden cultivar plantas que ofrecen una mejor resistencia a las plagas, lo que reduce la necesidad de pesticidas dañinos.
La biotecnología sin embargo conlleva algunos riesgos. Cultivar cultivos resistentes a los pesticidas puede estimular el crecimiento de malezas resistentes que son más resistentes a los pesticidas. Mejorar el ciclo de crecimiento de un cultivo también puede resultar en un desequilibrio en el ecosistema, causando el aumento o la reducción de otras plantas o animales. Los biólogos también temen que el proceso de manipulación de la proteína vegetal pueda llevar a una nueva cepa de alergenos en los alimentos. Además, poco se sabe sobre los riesgos a largo plazo para la salud (si los hay) de comer alimentos genéticamente modificados.