Deshazte de los ratones colocando venenos en la casa; matándolos con cebos de comida y trampas con resortes; capturándolos con trampas de captura en vivo o trampas de pegamento y retirándolos a mano; expulsarlos eliminando todos los alimentos y fuentes de agua; o repeliéndolos con animales naturales depredadores como gatos o perros cazadores de ratones. Otro método es el uso de un aerosol químico o natural o un dispositivo de repulsión electrónica.
Considere cada método cuidadosamente antes de utilizarlo. Los venenos, aunque son efectivos, pueden ser mortales para las mascotas familiares y los niños pequeños. Además, los venenos son graduales, lo que permite que el mouse expire en una ubicación separada y difícil de alcanzar.
Las trampas instantáneas son igualmente peligrosas para las víctimas no intencionadas si no se colocan adecuadamente y deben mantenerse fuera del alcance de los niños y las mascotas. También se sabe que los ratones evaden una trampa instantánea mientras siguen robando el cebo. Busque marcas efectivas o intente usar mantequilla de maní como cebo. La colocación de dos trampas de presión una al lado de la otra y el bloqueo de las rutas del mouse con trampas de presión puede aumentar su efectividad.
Las trampas de pegamento son exitosas y no tóxicas para los humanos. Sin embargo, los ratones se capturan vivos utilizando estas trampas y, si no se liberan con aceite vegetal, mueren lentamente por deshidratación, inanición, exposición o asfixia. Estas trampas pueden considerarse inhumanas y están reguladas en algunas áreas. La mejor protección contra los ratones en la casa es evitar que entren. Selle todas las aberturas que tengan un tamaño de un cuarto de pulgada o más.