Una divertida actividad bíblica para niños se llama el juego Fruit of the Spirit, que ayuda a los niños a aprender Gálatas 5: 22-23. El juego consiste en un círculo de sillas orientadas hacia adentro con una silla menos que los niños disponibles. Los niños sentados recogen silenciosamente un fruto del espíritu. El niño de pie grita una fruta del verso, y los que la eligieron deben encontrar asientos vacíos. Si él dice "cesta de frutas molesta", cada niño encuentra un nuevo asiento.
Otra actividad bíblica divertida para los niños es el Juego de estímulo, y el objetivo es que los niños reconozcan los dones que Dios les ha dado. El juego comienza con los niños sentados en un círculo, y se les da un objeto como una pelota para reconocer de quién es el turno de hablar. La persona con la pelota dice lo que piensa que alguien tiene habilidad y lo que imagina que Dios usó para hacer y luego pasa la pelota a la persona de la que estaba hablando. La persona que recibe el balón repite este proceso y se lo pasa a alguien nuevo, de modo que cada persona reciba el balón antes de que alguien pueda recibirlo por segunda vez. Los niños se involucran en el juego debido al elemento sorpresa de no saber inicialmente quiénes están siendo descritos, y se sienten alentados por sus propias habilidades y la creencia de que Dios tiene un plan para ellos.