¿Cuál es la diferencia entre deontología y utilitarismo?

La diferencia principal entre la deontología y el utilitarismo, dos sistemas de ética en competencia, es que el sistema anterior se ocupa de si un acto es intrínsecamente correcto o incorrecto, mientras que el segundo sistema cree que solo las consecuencias de un acto son importante. La deontología se ocupa de las intenciones y los motivos. El utilitarismo se enfoca solo en los resultados.

Los defensores del utilitarismo creen que todas las acciones deben buscar producir el mayor bien para el mayor número de personas, según la Enciclopedia de Filosofía de Stanford. Esto se aplica incluso si un acto perjudica a una persona inocente. Por ejemplo, si un cirujano tiene la oportunidad de salvar tres vidas al extraer los órganos de una persona sana, la teoría utilitaria sugiere que dañar a una persona sana es aceptable para salvar una mayor cantidad de vidas.

En contraste, la deontología se centra en los aspectos morales de cualquier acción, no en sus consecuencias. Esta filosofía cree que algunos actos siempre están mal, independientemente de las consecuencias. Los deontólogos encuentran que mentir es inaceptable, por ejemplo, incluso cuando alguien miente para lograr un resultado deseable.

Ambos sistemas tienen debilidades. Por ejemplo, los críticos afirman que el utilitarismo justifica esclavizar a un pequeño grupo de personas para ayudar a un grupo más grande. Los críticos de la deontología señalan que su rigidez no permite casos excepcionales en los que una acción moralmente dudosa evita causar daño a los demás.