En la vida cotidiana, la biométrica se utiliza como escáneres de iris en los aeropuertos por motivos de seguridad, como dispositivos de reconocimiento de voz en los automóviles, para acceder a edificios con huellas dactilares, obtener acceso a detalles vitales en los bancos de sangre y para registrar la asistencia en las escuelas. /strong> También se usa en los teléfonos inteligentes modernos que vienen con un escáner de huellas dactilares.
En muchos aeropuertos grandes, la biométrica se utiliza en forma de escáneres de iris. Los usuarios deben crear una cuenta y escanear su iris para conectarlos a la cuenta. Sus detalles se almacenan en una base de datos internacional. Como resultado, los usuarios pueden entrar en una cabina y escanear su iris en lugar de esperar en largas colas de pasaportes.
Los escáneres de huellas digitales se utilizan en instalaciones de alta seguridad para permitir solo la entrada personal autorizada.
Todos los autos usan reconocimiento de voz cuando usan Bluetooth y otros sistemas de entretenimiento. Algunos coches también utilizan la biométrica para desbloquear las puertas.
En los bancos de sangre, es importante preservar la identidad de los donantes. En el pasado, esto se hacía mediante la emisión de tarjetas azules que contenían toda la información que requerían los donantes. Ahora es posible que los donantes accedan a su información vital mediante el reconocimiento de iris o huellas dactilares.
En las escuelas, los datos biométricos se utilizan para sacar libros de la biblioteca y pagar las comidas. También se utiliza para garantizar que solo los alumnos y adultos autorizados accedan a los edificios escolares.