Calcule el costo de reubicación de ladrillos al determinar el área de superficie que necesita trabajo, la profundidad de las juntas y la cantidad de personas que completan el trabajo. Otros factores que pueden influir en el costo incluyen el precio total de los materiales y el tipo de herramientas utilizadas, ya que el trabajo manual normalmente cuesta más que usar una amoladora eléctrica.
Comience por encontrar el área total del espacio de ladrillo que necesita volver a colocar, lo que generalmente implica multiplicar la longitud del muro por la altura. En situaciones en las que la pared tiene una forma extraña, como un polígono con múltiples lados o áreas inclinadas, es posible que deba dividir la superficie en secciones más pequeñas y sumar los valores individuales. Luego, mida la profundidad de las juntas, ya que las juntas poco profundas a menudo significan que el trabajo requiere más atención y, por lo tanto, más trabajo. También decida si desea realizar un cambio de posición completo o un señalamiento, lo que puede requerir un trabajo adicional nuevamente en el futuro.
Presente estas cifras al contratista, y discuta la posibilidad de usar una amoladora eléctrica para acelerar el procedimiento. Las amoladoras eléctricas permiten una remoción más rápida del mortero existente y, por lo tanto, un costo menor, pero requieren habilidades adicionales y aumentan las probabilidades de dañar el ladrillo. Estas herramientas requieren una profundidad de unión de al menos 1/2 pulgada. También decida la cantidad de trabajadores para el trabajo y la calificación de los materiales, lo que puede aumentar significativamente el precio total.