Algunas de las formas de aumentar la firmeza de un colchón blando o más viejo son cubrirlo con un cubrecolchón o reemplazar el somier existente por uno nuevo. Otra opción es simplemente voltear el colchón.
Agregar un colchón a un colchón suave le permite aumentar la firmeza y el apoyo que recibe. La mayoría de los toppers están hechos de espuma o látex y vienen en una variedad de espesores. Considere el material utilizado y el grosor para determinar la almohadilla que se adapte a sus necesidades específicas de sueño. Los colchones de espuma con memoria son una opción popular debido a la forma en que se adaptan a la forma de su cuerpo y brindan un soporte más personalizado.
Reemplazar una caja vieja por una nueva aumenta la firmeza general que experimenta mientras duerme. El somier proporciona un soporte adicional al colchón, pero con el tiempo la madera o los resortes utilizados se debilitan y ceden. Una alternativa a la sustitución completa de un somier es colocar una lámina de madera contrachapada entre el somier y el colchón. Esto agrega una base sólida debajo del colchón, lo que lo hace sentir más firme.
Todo propietario de colchón debe voltearlo cada seis meses para evitar la formación de hendiduras en el cuerpo. Si no puede voltear su colchón porque tiene una almohada, simplemente gírelo 180 grados.