Los pisos de madera de cerezo brasileños se pueden limpiar con una solución de agua y limpiador de ventanas. Mezcle una solución usando un limpiador de ventanas al 10 por ciento para regar y sumerja un trapo en la solución para saturarlo. Siempre asegúrese de escurrir bien el trapo antes de usarlo, ya que el agua es la principal causa de daños al piso de madera. Coloque el trapo en el suelo y, con una escoba, empújelo.
Un piso de madera de cerezo brasileño se puede limpiar de esta manera recorriendo todo el piso una o dos veces para eliminar toda la suciedad acumulada. El trapo debe volver a saturarse en la solución y escurrirse con frecuencia para eliminar la suciedad que se está recogiendo del suelo. Este proceso debe completarse mensualmente para evitar daños en la superficie del piso. Entre limpiezas, use una aspiradora con regularidad para eliminar el polvo y otros residuos del piso.
Los derrames húmedos o pegajosos se pueden limpiar entre manchas con un limpiador de ventanas y una toalla húmeda. Evite el uso de estropajos o lana de acero al limpiar el piso, y no use blanqueadores ni quitamanchas. El uso de almohadillas de fieltro debajo de muebles pesados puede ayudar a prevenir daños y rasguños en la superficie del piso.