La solución para una puerta combada depende de la gravedad de la deformación. Si la puerta tiene una deformación leve, pueden solucionarse el problema, como cortar las bisagras, ajustar el pestillo o agregar una tercera. Si la deformación es demasiado mala para estas correcciones, se puede enderezar utilizando pesos o planearse.
A veces, simplemente apretar las bisagras de una puerta puede arreglar una deformación. Si eso no ayuda, se debe intentar lo siguiente:
- Bisagras : intente ajustar las bisagras para ajustar el ángulo de la puerta. Agregar una tercera bisagra entre los dos estándares también puede ayudar.
- La parada : ajustar o cambiar la posición de la parada puede arreglar las puertas torcidas
- Enganche y golpee la placa : si el arco de la puerta está en el lado de la manija o del pomo, intente ajustar el pestillo.
- Uso del peso : si la puerta está torcida, podría ser necesario quitarla de las bisagras y usar el peso para enderezarla. La forma más fácil de hacerlo es usar caballetes para sujetar la puerta y colocar bolsas de arena en la sección inclinada hasta que quede recta nuevamente. Asegúrese de proteger la sección arqueada antes de agregar el peso.
- Cepillado : una alternativa para puertas mal curvadas es planearlas. Este arreglo nuevamente requiere que se retire la puerta de las bisagras.