El texto sin formato no admite el formato, como negrita, cursiva y color. El formato no puede incluir imágenes o gráficos en el texto del cuerpo, aunque un usuario puede incluir objetos como adjuntos en un correo electrónico. HTML, por otro lado, crea contenido que es similar a los documentos tradicionales y admite varias fuentes, colores y listas de viñetas. Un destinatario de un mensaje HTML lo ve como fue enviado.
El texto sin formato ocupa menos ancho de banda y es posible que no se marque como spam. Dado que HTML envía mensajes con formato rico, es la mejor opción solo cuando el programa receptor puede interpretarlo; de lo contrario, su destinatario podría no poder recuperarlo.
Se puede hacer fácilmente que un correo electrónico HTML se vea como el formato profesional que una persona puede recibir de una organización auténtica, como el banco. Como el formato del correo es más susceptible al uso malicioso que el texto simple, se recomienda a los usuarios que lo abran solo si provienen de una fuente confiable. Por ejemplo, un correo HTML puede tener un error que le dice al remitente si el receptor lo ha abierto y esto puede exponer al receptor a más spam.
Un usuario puede configurar su aplicación de correo electrónico para enviar mensajes en el formato preferido.