La forma de una molécula es importante porque es una característica que a menudo determina el destino de un compuesto con respecto a las interacciones moleculares. Los métodos de farmacología también han observado que determinar la forma molecular es importante en el descubrimiento de fármacos, virtual Detección y toxicología predictiva.
La forma de una molécula determina la forma en que se comporta en la naturaleza, y las formas moleculares se describen utilizando terminología geométrica. La naturaleza misma de una molécula depende de la forma, así como del cambio de electrones en el enlace. La forma de una molécula influye en las propiedades físicas y químicas de los elementos involucrados.
Determinar la forma de una molécula es esencial para comprender las moléculas en las reacciones químicas. Las enzimas tienen la capacidad de diferenciar entre grupos de moléculas funcionales mediante el reconocimiento de formas. Las rutas bio-sintéticas que producen productos naturales utilizan el reconocimiento de formas para la oxidación selectiva.
El reconocimiento de formas químicas también desempeña un papel esencial en el uso de los cinco sentidos. Muchos estudios han apoyado la idea de que la forma molecular es importante para la actividad biológica. La forma molecular es útil para describir las moléculas individualmente, así como la naturaleza de las interacciones entre las moléculas.
Los métodos computacionales utilizados por la farmacología molecular permiten realizar comparaciones rápidas entre moléculas pequeñas y moléculas pequeñas con sitios receptores de proteínas.