El ADN, también conocido como ácido desoxirribonucleico, pertenece a una clase de macromoléculas orgánicas poliméricas llamadas ácidos nucleicos. El único otro miembro de esta clase es el ácido ribonucleico o ARN. Los ácidos nucleicos fueron descubiertos por primera vez en 1869 por el científico suizo Friedrich Miescher.
El ADN y el ARN desempeñan funciones importantes como portadores de información genética en biología, permitiendo los mecanismos de la herencia y la síntesis de proteínas. Los ácidos nucleicos son polímeros de nucleótidos, que están compuestos por un azúcar de cinco carbonos, también llamado azúcar pentosa, una base nitrogenada y un grupo fosfato. El azúcar es desoxirribosa, en el caso del ADN, y ribosa, en el caso del ARN.